La imagen extraída del cartel de la película «Yo, Robot» de Alex Proyas, protagonizada por Will Smith es una magnifica parodia de la ambición sin limites del Duque de Palma Don Iñaki Urdangarin. En el cartel del film pone debajo del titulo : «Un hombre lo vio venir«. En este, suprimida la «t» final del mismo se indica: «Un hombre lo intentó acaparar todo» porque lo del señor Urdangarin, ha sido un caso patológico de avaricia y ambición , igual al de la historia del «rey Midas«.

Virgilio, en «La Eneida» nos cuenta esta historia de Midas, rey de Frigia que aunque era muy rico «lo quería todo» y le pidió al dios Dionisio el don de convertir «todo cuanto tocara en oro». Se le concedió su deseo y al principio, nuestro rey saltaba de gozo al ver que al tocar las piedras, estas «se convertían de inmediato en ese metal»; sin embargo, muy pronto, nuestro Rey vio que su ambición «era una maldición» porque todo cuanto tocaba para comer y beber lo convertía en oro e incluso a sus seres queridos los convirtió en «estatuas doradas».La moraleja de la historia es que «la ambición sin limites castiga al que la padece«.

Según los datos recopilados por el diario digital «La informacion» se puede deducir que Don Iñaki Urdangarin ganaba incluso más dinero que su suegro el Rey» por sus tres cargos en el grupo Telefónica

El Duque de Palma ocupa la «presidencia de Telefónica International USA» y aunque su sueldo no es público, ateniéndonos a la reglas de la operadora, este podría rondar los 200.000 euros. Aquí «no termina su nómina» porque este puesto de «Presidente de Telefónica International USA» implica que además de encargarse de las relaciones institucionales de la compañía en Latinoamérica, lleva parejo el de ser «consejero independiente» de la actual ‘niña bonita’ del grupo: Telefónica Brasil, que según su memoria anual de 2010 dio a sus consejeros un sueldo fijo de 1,8 millones de euros y a esa cifra hay que añadirle, otro millón de euros por «un plan de incentivos con acciones de Telefónica». Si dividimos esa remuneración entre los 16 miembros que conforman el consejo de la filial brasileña, nos da un salario medio «complementario» de 171.000 euros para el consejero Don Iñaki.

O sea, tenemos 200.000 euros de «nómina» mas otros 171.000 euros anuales por presidir esa filial que son 371.000 euros anuales. ¿Hemos acabado? Pues no porque Don Iñaki tiene un «tercer cargo» que es el de «Presidente del comité de Relaciones Institucionales de Telefónica de Latinoamérica» por el que presumiblemente podría engrosar su nómina, en aproximadamente otros 200.000 euros. En total, y sólo con los sueldos de sus «tres cargos» el Duque de Palma tendría una nómina que podría alcanzar casi los 600.000 euros brutos anuales mas «otros beneficios» por trabajar fuera de España que Telefónica concede a su personal «ex patriado» consistentes en una «retribución en especie» que incluye el pago de la casa, la educación de los hijos y el seguro médico para toda la familia.

La conclusión es evidente. Don Iñaki Urdangarin «gana más que su suegro el Rey«, porque el salario de su Majestad es de 293.000 euros anuales, de los que 140.000 euros son para dotación personal y el resto para gastos de representación. Pues eso no «fue suficiente» para él y tuvo que embarcarse en los escándalos que ya conocemos

Volviendo a aquello de que la ambición sin limites » castiga al que la padece» el final del rey Midas fue el de que tuvo que suplicar al dios Dionisio que le quitara su «maldición dorada” y el buen dios se lo concedió a cambio de un precio que era el de que » le costaría todo el oro de su reino”

En nuestra vida real, Don Iñaki Urdangarin es «Midas» pero el dios Dionisio va a ser «la justicia española» y mucho me temo que resolverá finalmente el problema del señor Duque de una forma «mas amigable y a un menor precio» que el la de la historia de Virgilio, es decir sin que «le cueste a Don Iñaki «todo el oro de su patrimonio” . Tal vez todo este asunto termine con «una multa» (que no será de «todo el oro del Duque) , su «apartheid » de la Casa Real, y- por supuesto- con la defensa a ultranza de «la inocencia de Doña Cristina» porque nuestra Infanta no puede ser imputada ya que para ella «no hay elementos incriminatorios». Don Iñaki pasara este «mal trago», conservando «bastante de su oro» y por supuesto «sus cargos en Telefónica» . De hecho ya «le han renovado su contrato»

Y yo pregunto: ¿Renovaría Telefonica el contrato a uno de sus directivos si estuviera implicado en un gran sumario como el de «Palma Arena» que lo señalara como accionista de la empresa inmobiliaria «Aizoon» destinataria de dinero público llegado de Baleares o de Valencia? Me imagino que no, pero el señor Duque es «Citius, altius, fortius» y la «marca familia real» es un «fondo de comercio» de enorme valor.