El próximo 23 de julio se celebrarán elecciones a Cortes Generales y hoy quiero hacer referencia a este artículo del diario digital TheObjetive del pasado 1 de Julio acerca de como el Gobierno de D.Pedro Sánchez nos hace cada vez más pobres. Aunque pagamos más impuestos, ese incremento de la recaudación del Estado no se ha traducido en un mayor nivel de vida para los españoles y la presión fiscal ha subido hasta 22 puntos porcentuales desde 2017.

Repasando ese reportaje me he acordado de un refinadísimo diálogo de hace cuatro siglos entre Colbert y Mazarino durante el reinado de Luís XIV de Francia, el ‘Rey Sol’. Recordemos que Jean-Baptiste Colbert, era el controlador general de Finanzas de Luis XIV, que acumulaba casi todos los cargos del estado y que tenia una constante relación con el rey, siendo uno de sus hombres de confianza. En cuanto al cardenal Mazarino (Jules Mazarin) fue el sucesor del cardenal Richelieu como primer ministro y era un hábil diplomático y político, primero al servicio del papa y más tarde al servicio del reino de Francia como Superintendente.

Colbert: Para conseguir dinero, hay un momento en que engañar al contribuyente ya no es posible. Me gustaría, Señor Superintendente, que me explicara cómo es posible continuar gastando cuando ya se está endeudado hasta al cuello…

Mazarino: Si se es un simple mortal, claro está, cuando se está cubierto de deudas, se va a parar a la prisión. ¡Pero el Estado…! ¡Cuando se habla del Estado, eso ya es distinto! No se puede mandar el Estado a prisión. Por lo tanto, el Estado puede continuar endeudándose.
¡Todos los Estados lo hacen!

Colbert: ¿Ah sí? ¿Usted piensa eso? Con todo, precisamos de dinero, ¿y cómo hemos de obtenerlo si ya creamos todos los impuestos imaginables?

Mazarino: Se crean otros.

Colbert: Pero ya no podemos lanzar más impuestos sobre los pobres.

Mazarino: Es cierto, eso ya no es posible.

Colbert: Entonces, ¿sobre los ricos?

Mazarino: Sobre los ricos tampoco. Ellos no gastarían más y un rico que no gasta, no deja vivir a centenares de pobres. Un rico que gasta, sí.

Colbert: Entonces, ¿cómo hemos de hacer?

Mazarino: Colbert, ¡tú piensas como un queso de Gruyere o como un orinal de enfermo! Hay una cantidad enorme de gente entre los ricos y los pobres. Son todos aquellos que trabajan soñando en llegar algún día a enriquecerse y temiendo llegar a pobres. Es a esos a los que debemos gravar con más impuestos…, cada vez más…, ¡siempre más!
A esos, ¡cuánto más les quitemos, más trabajarán para compensar lo que les quitamos!
¡Son una reserva inagotable!

Si sustituyésemos los nombre de Colbert por el de nuestro presidente D. Pedro Sánchez y el de Mazarino por el de nuestra Ministra de Hacienda y Función Pública Doña María Jesús Montero Cuadrado ¿acaso este diálogo no cobraría «plena actualidad»?

O tal vez pasa lo que dijo Cayo Julio César, el Viejo (100-44 a. C.) en la que manifestaba lo siguiente: “Si la clase media sirve para algo es para trabajar y pagar impuestos, con los que podemos sobornar a la plebe de Roma«.

Tened esto en cuenta a la hora de depositar vuestro voto en las urnas