Todo es posible en Cataluña

El pasado mes de Noviembre don Artur Mas nos presentaba su hoja de ruta para llegar a la independencia de Cataluña en 18 meses y ayer culminó el proceso anunciándonos que habrá elecciones anticipadas para el 27 de septiembre de 2015

El único problema es que el señor Mas no ha podido sacar adelante su idea de unas elecciones plebiscitarias para convertir a Cataluña en Estado independiente con la fórmula de una «candidatura única» que- en forma de plebiscito- lograra la mayoría absoluta y ahora serán los distintos partidos los que irán por libre, aunque es de suponer que- de triunfar las opciones independentistas- se formará una coalición para la constitución de ese Estat Catalá. Don Artur, que es muy previsor, ya nos ha anunciado que se van a empezar a crear las estructuras de Estado necesarias y las leyes para esa futura nación independiente.

Me imagino que dentro de todos estos trabajos, el señor Mas también tendrá que preparar el programa electoral de su partido para convencer a sus potenciales votantes. Ya dispone de uno estupendo como base , el de 2012, donde CiU nos presentaba a una maravillosa Cataluña virtual.

En aquella propuesta, Cataluña iba a ser un lugar idílico en donde la tasa de paro descendería a niveles próximos a la media de la UE; se crearían 60.000 nuevas empresas con 100.000 empleos vinculados a proyectos emprendedores; habría menos impuestos; se cumpliría el «déficit cero» y se reduciría la presión fiscal individual. La sociedad catalana tendría mas vuelos directos intercontinentales de larga distancia; tres de sus universidades estarían entre las 100 primeras del mundo y el 50 por ciento de los hogares dispondría de acceso a internet con banda ancha ultrarápida. No faltaban otras propuesta originales para esa Cataluña independiente, como las de prometer «mas salud» para los ciudadanos catalanes, afirmando que los mismos aumentarían en un 5 por ciento su esperanza de vida e incrementarían en 5 puntos su tasa de supervivencia frente al cáncer; también se reducirían a la mitad el número de muertos y heridos en las carreteras y no faltaban otras cosas tan originales como las de que aunque «Cataluña would speak english» al formar parte de la UE se promoverían las reformas necesarias para impulsar el «uso del catalán » en las diferentes instituciones comunitarias.

Ya sabemos que- en su día- hubo «esquiroles» como Societat Civil Catalana que no estuvieron de acuerdo con aquellas propuestas por lo que me imagino que ahora don Artur pondrá a trabajar a todo su equipo para MEJORAR Y SUPERAR aquellas ofertas de 2012. Espero que nos ofrezca, no 100.000 sino 120.000 nuevas empresas, no tres sino diez de sus universidades entre las 100 primeras del mundo y que el cien por cien de los hogares catalanes tenga acceso a internet y ¿por qué no? en vez de un 5 por ciento, la esperanza de vida de la sociedad catalana podría subir hasta un 10 por ciento con 10 puntos por lo menos de incremento de sus tasas supervivencia frente al cáncer.

Don Artur Mas tiene para esta noble tarea colaboradores tan cualificados como su consejero de Presidencia y portavoz don Francesc Homs, que por cierto ha hecho unas curiosas declaraciones sobre la inmersión lingüística, que me hacen ver que en Cataluña «todo es posible»

Si al señor Homs para que sus hijas no entiendan el castellano, no se le ocurre otra cosa que prohibir a las mismas el que vean las televisiones españolas en su casa el tema es muy serio y habría que darle a don Artur Mas un consejo. No será de mi cosecha sino que lo he extraído del discurso que don Federico García Lorca hizo al inaugurar la biblioteca de su pueblo en Fuente Vaqueros (Granada) en septiembre de 1931.

Decía aquel gran hombre: «No sólo de pan vive el hombre. Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí violentamente a los que solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos»

Por eso pienso que antes de revisar su programa electoral de 2012, CiU lo que tendría que hacer primero seria el revisar la manera de como sus colaboradores más directos ven las relaciones entre Cataluña y España y como contemplan también los valores de sus lenguas respectivas. Una vez aclarado esto, ya podrían hablarnos de independencia.