Bonnie Parker y Clyde Barrow fueron una pareja muy famosa de gángster de la historia y ahora los especialista en Photoshop se empeñan en «comparar a aquella pareja de canallas» con la formada por ese ilustre matrimonio de la Infanta de España doña Cristina Federica Victoria Antonia de la Santísima Trinidad de Borbón y Grecia y el ex-jugador de balonmano llamado don Iñaki Urdangarín, Liebaert, llamándolos «los nuevos Bonnie and Clyde» españoles,

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http://www.izaping.com/17275/bonnie-y-clyde-urdangarin-y-cristina.html

Pero nada más lejos de la realidad, porque tan sólo podemos comparar a nuestra real pareja con los «inicios» de la otra de 1932 cuando con la gran depresión estadounidense empezaron como «pequeños ladrones«. Luego pasaron de «ladronzuelos» a «asaltantes y asesinos» ( se les imputan al menos 13 asesinatos) y terminaron merecidamente muertos en un retén policial en Louisiana el 23 de mayo de 1934.

La últimas noticias que vamos conociendo de nuestro ilustre matrimonio real parece apuntar a que don Iñaki y doña Cristina tienen algún parecido con los «Bonnie and Clyde» de sus principios ( por su atracción a «apropiarse de lo ajeno«) pero salvando este defecto pienso que pueden ser bellísimas personas aunque presuntamente «hayan metido mano en la caja«.

Las presunciones de lo de «apropiarse de lo ajeno» (igual que Bonnie and Clyde en sus principios) nos la dan las últimas noticias que vamos conociendo. La última es la de que parece ser que utilizaron fondos públicos del Instituto Nóos para blanquear dinero mediante la sutil fórmula de ‘autoalquilarse’ el palacete de Pedralbes poniendo la sede y la razón social de aquel Instituto en el palacete de la calle Elisenda Pinós de Barcelona.

También acabamos de conocer que el real matrimonio pagó con cargo a Aizoon al arquitecto que remozó su casa en Pedralbes ,

Al parecer, también presuntamente cargaron a Aizoon «como gastos de empresa» otros «gastos personales«. El último informe de la Agencia Tributaria nos decía que la Infanta y su marido pagaron otras muchas facturas del palacete de Pedralbes «con los fondos de Aizoon». Por ejemplo, una de 136.834,60 euros de la firma Grao Rosa Cerverto para mobiliario e iluminación y otra de 125.431,07 euros a Levante S.A. en concepto de «construcción y reparación».Y no sólo eso también pagaron un safari, viajes a Roma, vinos, ropa neoyorkina y hasta libros de Harry Potter..

Y tanto «va el cántaro a la fuente» que estos presuntos latrocinios ya están generando una vastísima prueba documental con informes policiales, declaraciones de Hacienda, facturas, ‘emails’, actas de reuniones, escrituras, extractos bancarios, movimientos de tarjetas, etc que hacen que el juez del caso Nóos, don José Castro, ya se esté planteando volver a citar a la Infanta para imputarla..

Pero ella cuenta con «la protección del gobierno español» que a través de su Ministerio de Hacienda ya nos ha dicho que aunque firmara de su puño y letra como arrendadora y arrendataria y pusiera su «DNI especial» con el número 00000014-Z en aquellas facturas falsas de Aizoon, no tiene responsabilidad porque «firmó de forma inconsciente» y también doña Cristina tiene como defensor al ilustre jurista don Miquel Roca Junyent, padre de la Constitución (y últimamente «defensor de la segregación de Cataluña«) que se ha tomado a broma su posible imputación con esta frase jocosa: «Por favor, qué cosas» pidiendo «que se deje trabajar a la justicia»

Pero por mucho que se empeñen en «vendernos la burra» resulta que doña Cristina «tenía una participación directa en los manejos de la empresa «Aizoon», y el diario «El Mundo» ya nos ha contado que la Infanta fue informada por don Iñaki Urdangarin de que las acciones que compró por 1.500€ valían 589.000€ . O sea, que sólo sus acciones ya se multiplicaron por 390. En 2003 valían 1.500 euros y en 2006, un total de 589.807.26. No hace falta ser muy sagaz para deducir que la Infanta «era consciente de los beneficios de su empresa«.

Y no lo digo yo sólo. Este asunto ya empieza a tomarse a cachondeo en algunos medios extranjeros. El diario digital «The Local» publicaba el pasado día 16 de Octubre una noticia que titulaba : «Diez cosas que se ha comprado la Infanta Cristina con tu dinero» y nos daba una lista de «los mejores regalitos» nos que se hicieron doña Cristina y don Iñaki con los fondos públicos y privados que presuntamente desviaron Aizoón

Y el diario «The Guardián» nos saltaba con este titular explosivo: » Spain warms to Mongolia – a new take on satire» (España calienta a Mongolia- una nueva forma de sátira) con una frase que decía: «Mongolia hija de puta» pero sobre la imagen de doña Cristina (a buen entendedor…)

Así es que la hija menor de nuestro Rey y su ilustre consorte, para mi no se parecen a Bonnie and Clyde más que a «los primeros tiempos» de aquella pareja cuando se juntaron y su ambición los llevó por el «mal camino«. Lo peor es que pueden terminar creyéndose que «están por encima del bien y del mal» con tanto «amparo gubernamental «. Creo que deberían de procesarlos de una puñetera vez y que en este proceso «se defiendan», si es que pueden