En su última aparición, nuestro sin par señor Jose Luis Rodríguez Zapatero ha recordado a D. Ramón Gómez de la Serna para explicar cual será su retiro, citando una de sus mejores frases:

“el mejor destino que hay es el de supervisor de nubes, acostado en una hamaca y mirando al cielo”.

Deseo ardientemente que Zapatero «supervise nubes» ya que no ha sabido «supervisar España«, pero me temo que «ni siquiera eso va a saber hacer» porque para «supervisar nubes» tienes que echarle mucha imaginación y mucha valentía para «catalogarlas todas» y un ser como Zapatero al que, precisamente le ha faltado imaginación y valentía para poner en marcha las soluciones que necesitaba España no creo que pueda «catalogar nubes» después de FRACASAR en la responsabilidad de dirigir un país,

Aunque, bien mirado es fácil comprender lo que ha pasado en España en estos últimos años. Zapatero se ha dedicado «a supervisar los cielos» en vez de «supervisar al País» y la frase de D. Ramón bien podría ser el resumen de sus dos legislaturas. Mirar a las nubes, negar los problemas y en caso que se vislumbren nubarrones, seguir en la hamaca esperando a que el temporal “escampe”.

D. Ramón Gómez de la Serna era un genio adelantado que en una sencilla frase definía un objeto o un problema, poniendo sobre él el dedo de su ironía. Entre sus muchas greguerías hay una que se puede perfectamente aplicar a nuestro presidente del gobierno, supervisor de nubes a tiempo completo durante los últimos siete años y medio. Es esta:

“La sidra quisiera ser champán pero no puede porque no ha viajado al extranjero”.

Y Zapatero, un inútil, al que de vez en cuando le da por la poética ( recordemos cuando dijo aquello de que «la tierra sólo es del viento» ) es eso: Un fiasco que «HA QUERIDO SER LO QUE NO ES».